Rompí una botella de cerveza,
empapé todo el coche.
Tuve que volver a la tienda,
el chino me miró con mala cara.
Me corté la mano,
limpiando cristales.
Hay días vacíos,
que no me sale nada.
No encuentro nada,
en mis libros viejos.
Perdí todas las fotos
del colegio.
A penas siento,
esto que escribo.
Seguro que en el infierno,
hay días igual de nublados.
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