Todos los poetas
escritores,
guionistas,
dramaturgos,
y demás gentuza...
deberíamos venir
a este mundo
con un manual
de usurario.
Ya que nadie nos
entiende...
al menos que nos den
uso a este desprendimiento
de sexo, lagrima y deseo.
Un manual
con indice,
con anular,
y sobre todo
con corazón:
el que necesitamos
para que nos hablen
y nos programen
para no pasar
más pena
en los canales
de esta vida
codificada,
que a penas
entendemos
por no tener
lenguaje digital.
Programa al escritor
en sus canales
de lenguaje,
pide,
sino lo trae,
el manual
de instrucciones:
Qué no sufra.
Después de lo del otro día el un pájaro me hizo perseguir tu nombre y leí una entrevista muy divertida ... "En cuanto si es autobiográfico, he de decir que sí que casi todas las historias las he vivido yo ó directamente las imagino".
ResponderEliminarAbrí tu manual por la página 42 y decía: "Los hombres no necesitan manuales, sino una batería para recargarles las pilas".