12 años, 7 meses y 28 días: Jackie para siempre.

 Aún recuerdo jugar contigo

en aquellas mañanas a solas 

mientras el sol acariciaba el suelo

en ese invierno en el cual llegaste.

Siempre fuimos un equipo, 

incluso antes de tu llegada

ya participábamos 

en juegos en las noches 

en las que escribía poemas raros.

La vida ha sido justa contigo.

Has viajado, te has bañado en mares grandes,

en aguas pequeñas, en ríos escandalosos

y comido todo lo que pudiste.

La vida te trató bien.

Lo que fue injusto fue la llegada

de tu muerte. 

Esa mierda de muerte advenediza.

Recordaré para siempre nuestro último

paseo, nuestra última mirada...

Recordaré siempre la última vez que montaste en coche

justo antes de tu muerte.

Fuiste generosa al extremo...

tan generosa que una vez te habías ido

no pude evitar volver corriendo a besarte en tu cabecita

pequeña y negra... en aquel hocico tan canoso 

como mi barba...

Y al despegar mi cara tras el beso..

toda tu espalda me contestó

erizando el pelo de tu lomo... 

Sé que nos dabas las gracias...

Eres generosa hasta después de muerta.

Lo sé, pierdes a quien quieres y es una mierda.

Pierdes la ilusión y es una mierda,

Te decepcionan y es una mierda...

porque la vida es una mierda

pero basta tener un pequeño

momento como los que nos diste...

y entonces solo entonces

arden todas oscuras muertes

con el fuego avivado de la esperanza.