Camino, hago trocha,
desarrollo sendas,
por las que la hierba
crece a mi paso,
en las que las sombras
dan cobijo del calor
y no hay más,
y no hay más,
nada más que eso.
Mi generosidad
me vació los bolsillos,
mi generosidad:
me llenó el corazón.
Solo eso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario