Me llamaron
de una cafetería
con tintes literarios
para dar una lectura
de mis textos,
en Madrid.
Accedí porque
era una oferta atractiva
bebida, posibilidad de editar
y 250€ por leer.
Cogí mis textos en papel
y me fui hasta allí.
Cuando llegué era muy temprano
y me dijo el camarero
que si quería algo,
me tomé un carajillo
para alentar el alma,
estaba nervioso.
Y como quedaba tiempo
me fui a dar un paseo,
llevaba algo de dinero, así que
entré en un bareto cercano
de esos de viejos,
donde
las botellas están
desde
que el camarero
cuarentón viajaba en cuna.
Esos sitios son baratos,
pedí una ginebra con tónica,
me bebí tres y me cobraron
once pavos.
Salí y me fui a pasear
la ginebra por las calles
de Madrid centro.
Entré en otro antro
y me apreté otras
dos ginebras...
ya me notaba
más acorde
con el mundo
o al menos lo entendía
mejor.
Pregunté la hora
y decidí volver.
Cuando llegue al lugar
de la lectura casi no puedo
entrar
estaba lleno.
Pensé:
- Pobres, no saben
que voy a dar una lectura-
Entonces me acerqué
a la barra y me busqué
un sitio a base de toques,
parecía que estuviese aparcando
el coche
en pleno centro.
Entonces el camata
me dijo:
-tío esto no se ponía así
desde hace años
y todos preguntan por ti-
Ahm!- contesté-
la gente esta peor
de lo que yo creía.
Jamás imaginé que un Blog
llegara a tanta gente
En fin empezó
la lectura...
Durante la la lectura
me sudaron las manos
tanto
que se marcaban mis
manos grandes
en el vaso,
me bebí unas
dieciséis cervezas.
Acabé y me fui hasta la barra
a seguir, entonces se me acercaba
la gente a hablarme y a preguntarme
cosas a las que no sabía que contestar.
Al rato una tía que estaba
bastante buena me dijo
-Nene si follas igual que lees
podrías venirte a mi casa a
hacer poesía conmigo-
Yo borracho contesté:
-Nena voy tan ciego
que si te abrieras de patas
confundiría tu coño
con una nécora-
Solo recuerdo ver
como su culo se iba.
¿Por qué me pasan
estas cosas cuando voy borracho?-pensaba.
Al rato un tío me dijo que mi poesía
era una mierda, que no podía
meter tanta mierda contra el mundo
que el culpable de mi mierda era yo...
y bla, bla, bla...
Le mire y le dije:
¡¡¡o te vas o de la hostia
que te doy te tienen
que dar dos pasadas
de rodillo con mercromina
gilipollas!!!
Entonces se puso bravucón
y salí con el a la calle,
nos enzarzamos en una pelea,
después de unos cuantos
puñetazos
el tipo y yo acabamos
llorando y siendo amigos...
Solo recuerdo eso Frank-
Joder Cooper, para una vez
que te contratan en lo que te gusta
y destrozas el bar te emborrachas
y la lías!!! que raro!!!
Bueno Frank dame de beber
que tengo angustia-dije
Frank puso tres vasos
uno para mi, otro para él
y el tercero para Coralmazón.
Sirvió hada verde...
y nos fuimos por la puerta
de atrás del universo.