Reloj de río.

Yo tengo uno,
porque me gusta
el paso del tiempo,
no porque me envejezca
sino porque me gusta
atraparlo...
atraparlo,
atraparlo
atraparlo,
poseerlo
en mi muñeca
infinita;
es de acero
de polvo,
de estirpe
de perdición...
Lo lleno,
lo llevo,
es mío
porque la vida
me dice que agarre
su segundero
de doble filo,
sin miedo a la sangre
vieja de mi alma.

Avanza como un
cepo
de infinita
hermosura
que se viene
abajo,
con su
paso
de militar
inexorable.

Tengo uno,
sí,
pero no
me fijo
en su caminar
sino
en su río
completo
de meandro,
que esquiva
el aburrimiento
y se ríe
de sus agujas
de torpe arena.

8 comentarios:

  1. Aunque me cuesta entender la poesía -porque es arriesgado opinar, ya que el lector interpreta el texto y normalmente no coincide con lo que el autor quiso expresar- igualmente me tienta. Estupendo juego de imágenes, relojeras y atemporales. Me gusta el final cuando introduces la figura del reloj de arena.

    Alguien dijo "Hice un pacto con el tiempo, el no me persigue y yo no huyo de él. Un día nos encontraremos". Seguro que tú sabes quien fue.

    Gracias por tu visita en "A través"
    Un saludo.

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  2. y es que somos tiempo, relojes de agua, de río, de vida.

    Momo

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  3. Insurgente me alegra verte por aquí, Momo me encanta saber que continuas tras de mi.

    Gracias.

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  4. Me gustó, es como si fueras irreverente con el tiempo; el maldito tiempo que siempre termina atrapándonos. Saludos

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  5. Atraparlo, Atraparlo, Atraparlo.......tu poesía es un cepo de aire, atrapa el tiempo y nuestras voluntades. Que haces después con todo eso?. Besos. Eva.

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  6. me encanta, lo juro por diós, si me dás permiso, la escribo en una de las mías ,sabanas bajeras, que voy a preparar,

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  7. adelante... siempre que pongas mi nombre al final de ella.

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